El mes de junio de 2024 ha sido testigo de condiciones climáticas extremas en México, con registros de lluvias que marcan un hito histórico. Según el informe más reciente de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), las intensas precipitaciones acumuladas alcanzaron los 148.7 milímetros, superando en un 49 por ciento el promedio habitual para esta época del año. Este nivel de lluvia no se había registrado desde 1941, reflejando un cambio significativo en el patrón climático del país.

El incremento drástico en las precipitaciones ha provocado un aumento notable en los niveles de agua de los embalses, especialmente en Nuevo León. El paso del ciclón Alberto, combinado con una baja presión atmosférica, contribuyó a un aumento de 664 milímetros cúbicos de agua entre el 19 y el 23 de junio. Para manejar esta situación, se implementó una extracción controlada de 500 metros cúbicos por segundo de la presa La Boca, enviando el exceso de agua al embalse El Cuchillo.

Antes del período lluvioso, México enfrentó severas olas de calor que afectaron gravemente a la población. Las temperaturas superaron los 45 grados centígrados en varias regiones, alcanzando un récord de 34.5 grados centígrados en la Ciudad de México. Estas condiciones extremas resultaron en la pérdida de vidas humanas y desafíos significativos para la salud pública.